Los 170 años del DIARIO EL COMERCIO

El 4 de mayo de hace 170 años, una hoja impresa por ambos lados, se aventuraba por primera vez en las calles de Lima, su aparición fue algo extraño para tal época, ya que los medios informativos existentes sólo se dedicaban a difundir posiciones políticas, y a vanagloriar caudillos.
Sin embargo, esta publicación no defendía a ningún partido y no tenia color de bandera, llevaba por nombre, EL COMERCIO, y debajo tres palabras: Orden, Libertad y Saber, bajo este lema comenzaría a difundirse y formar parte de la vida de los peruanos.
Sus creadores fueron Manuel Amunátegui y Alejandro Villota, quienes tenían un pasado en común, pues Amunátegui había llegado al Perú perteneciendo a las filas del ejército Realista y Villota con el ejército Libertador, alguna fueron enemigos (por sus ideas políticas), ambos lucharon en la batalla de Ayacucho. Después de ello compartieron ideales y decidieron formar un primer diario llamado El Indígena, el cual no prosperó y dejó de editarse poco después, al cabo de unos años, se encontraron en Lima, y decidieron retomar el proyecto de formar un diario con ideas nuevas.
El primer ejemplar de El Comercio saldría impreso de la finca llamada “La Casa de Pila” en la calle arzobispo, la cual fue la sede del diario sólo 24 días, ya que luego se mudaría a la calle San Pedro donde se imprimieron 686 ediciones. Posteriormente el 9 de octubre de 1841 vuelve a cambiar de sede, bajo una mayor demanda del público, pues ya no se abastecían de suficientes ejemplares para la creciente población de Lima, y se traslada a la llamada Casa del Pino, actual sede del diario (Jr. A Mró Quesada 300).
La dupla de Amunátegui y Villota, formó con excelencia los primeros años del diario, hasta hubo tiempos en los que se presentaban dos ediciones por día, poco a poco El Comercio iba tomando el prestigio que merecía, ya que tantas veces había sobrevivido a la caprichosa inestabilidad política del país. En 1860 Don Alejandro Villota cae enfermo, y en busca de una cura viaja a Francia, donde lamentablemente fallece en 1861, sus restos descasan allí, demasiado lejos del proyecto que tanto am. A Don Manuel Amunategui ahora le tocaría una gran tarea, seguir conduciendo el diario, a pesar de su avanzada edad.
Era tiempo de encomendar a alguien responsable el futuro del diario, y Don Manuel Amunátegui no se equivocó al elegir al periodista José Antonio Miró Quesada, para sucederle en la dirección, ya que su trabajo siempre se caracterizó por la constancia y objetividad, cualidades que buscaba Amunátegui. Así entonces en 1875 la dirección del diario queda al mando de José Antonio Miró Quesada, quien sólo tenia 30 años, cuando asumió el cargo.
El diario empezaba a convertirse en una eminencia de las comunicaciones, no sólo en el Perú, ya que en todo el continente se admiraba la intensiva labor periodística de El Comercio, pero otra sería la escena al llegar, la Guerra del Pacífico, ya que en 1880 el presidente de aquel entonces Don Nicolás de Piérola, decidiera clausurar el diario. La guerra hizo lo suyo en nuestro país, dejando en escombros todo lo que pudo, menos el ferviente deseo de informar, al volver a las calles de Lima. Esto sucedió el 23 de octubre de 1883, el mismo día, en que las tropas chilenas desocuparon Lima.
Tres años después, en 1886, muere en su despacho Manuel Amunátegui, donde aún se conserva una placa conmemorativa, en la que se cita una frase dedicada a este gran hombre de prensa. Sus restos descansan en el Museo - Cementerio Presbítero Matías Maestro, junto a tantos otros grandes de la historia del Perú.
Por otro lado, Don José Antonio Miró Quesada deja la dirección del diario en 1905, asumiendo el cargo su hijo mayor Antonio Miró Quesada de la Guerra, quien permanece en el cargo hasta el fatídico 15 de mayo de 1935, día en el que es asesinado, junto a su esposa, hecho que causa conmoción en todo el país.
Ese mismo año asume la dirección del diario, Aurelio Miró Quesada de la Guerra, quien dirigiera el diario hasta el año 1950. En 1937 el diario celebra 50 mil ediciones y en 1939, cumple con orgullo un siglo al servicio del país, labor que demuestra una vez más en 1940, cuando el país fue remecido por un voraz terremoto, y el diario informa los hechos, a pocas horas de lo sucedido
En 1964 El Comercio cumple 125 años motivo por el cual publica una edición extraordinaria de 192 páginas, la cual se agota en la primera hora que sale a la venta, para abastecer a su público que iba creciendo de igual forma que crecía Lima, en 1966 se inaugura la rotativa Holer Colormatic, la cual lanza hasta 70 mil ejemplares por hora.
Durante el golpe de estado (1974) del gobierno del general Luís Velasco Alvarado, El Comercio pasa a manos del gobierno. Otra vez es censurada la libertad de prensa. En ese entonces la dirección periodística estaba a cargo de Luís Miró Quesada de la Guerra, quien fallece en 1976, y no llega a ver el retorno del diario, en 1980 el nuevo gobierno (de Fernando Beláunde Terry), devuelve a sus legítimos dueños, los diarios confiscados durante esta dictadura.
En 1984 el diario surge con un nuevo slogan: “un nuevo diario, con ideas nuevas”, innovando para mejorar su calidad. En este año El Comercio inaugura la planta de impresión en Pueblo Libre, sobre un área aproximada de 18 mil metros cuadrados y en donde pone en funcionamiento al offset Lithomatic II de la M.A.N. Roland, que era un moderno sistema de fotocomposición electrónica, que imprimía 80 páginas en simultáneo, con una capacidad de 75 mil ejemplares por hora, con lo cual el diario publica su primera edición a todo color el 29 de junio de aquel año.
El diario empieza a circular en todo el país, al publicar en 1994 la primera edición nacional, que contenía 5 cuadernillos, que los miércoles aumentarían a seis, bajo un nuevo slogan: “un solo gran diario para todo el país”. No solo se buscaba llegar a todos los peruanos, también al mundo entero, a través de la Internet, motivo por el cual en 1997 es creada la página web del diario. Con la llegada del Nuevo Milenio se vuelve a cambiar el sistema de la planta de impresión, con lo cual las revistas y suplementos son cada vez más, y el público cuenta con diferentes opciones de información.
Su primera edición fue recibida por los habitantes de Lima, como la moda de tener algo nuevo, algo hasta ese día sin precedentes, pero su característica objetividad, lo ha traído hasta nuestros días. El diario El Comercio, el decano de la Prensa Nacional, cumple 170 años de existir entre los peruanos, ya no es solo un medio de prensa, es parte de la historia del Perú.